Galapagar preservará la fiesta del toreo como uno de los legados de la localidad.
La localidad es hogar de ilustres figuras del toreo como Vitorino Martín, hijo del ganadero, o los matadores Frascuelo y Uceda Leal.
Este domingo, el salón de Plenos del Ayuntamiento de Galapagar ha acogido la celebración de la XXV edición de los tradicionales Galápagos de oro, un galardón que premia a las mejores faenas de la feria de Galapagar, celebrada el 14 de septiembre en honor a nuestro patrón, el Santísimo Cristo de las Mercedes.
El salón de Plenos del Ayuntamiento ha contado con muchos aficionados en una gala que ha sido conducida por Vitorino Martín, el hijo del ganadero galapagueño que ha puesto también a nuestro municipio en el foco de la tauromaquia por su gran tradición.Una cita en la que tampoco faltaron matadores como Frascuelo y Uceda Leal, también vecinos de Galapagar.
En esta edición, el Galápago de Oro ha sido otorgado al novillero Diego García, merecedor de este galardón como triunfador de la Feria. Además, también se han otorgado los siguientes premios:
– Mejor Faena: Diego García.
– Mejor Estocada: José Rojo.
– Mejor Par de Banderillas: Juan José Rueda «El Ruso».
El momento más emotivo ha llegado de la mano de la familia de Castro Fino, que han entregado el Premio al Mejor Puyazo, en el I memorial del premio que lleva el nombre de su padre fallecido el año pasado.
Una gala llena de cariño en el que la alcaldesa ha recordado que Galapagar es un pueblo taurino por excelencia y que debemos de preservar la fiesta del toreo como uno de los legados de nuestro municipio y que, pese a que se ha puesto en duda la tauromaquia en Galapagar, en actos como éste se demuestra que tiene mucha fuerza, que es una expresión de la cultura española y que amamos y tenemos que cuidar.
